¡Hola, Bienvenidos!

¡Hola amigos!


Os abro encantada las páginas de este blog. ¡Bienvenidos!

La cocina para mí es entretenimiento, un motivo para relajarme, expresarme, experimentar y hacer disfrutar a quienes prueban mi comida; incondicionales mi familia y amigos (siempre muy agradecidos), tengo motivos para poner pasión en cada uno de los platos que hago, ojalá logre transmitírosla.


Lo dedico a mi madre.

sábado, 30 de abril de 2016

BARRITAS DE COCO





Estaréis pensando que acorto el tiempo entre dulce y dulce y lleváis toda la razón. Obedece esto a que se me acumula la repostería que tengo en borradores desde hace unos cuantos meses. Así es que tendré que vaciar mi carpeta confitera y dejar espacioso su lugar.

Me preguntan por cositas dulces, vistosas y súper fáciles y rápidamente me he ido a estas barritas que podría hacerlas un niño medio espabilado.

Era yo aún adolescente cuando aprendí a hacer esta mezcla simple, que por aquel entonces me pareció un hallazgo increíble.

Nuestra "profe" de labores, sí habéis leído bien (entonces, en mi tiempo estudiantil, había profesoras de labores, no hace tanto ¡eh! jjj.), era un comodín y la acoplaban a cualquier ocurrencia que de la mano de la administración se decidiera. Podía enseñarnos las bases de una costura elemental, moral y ética, política, educación ¡y cocina! Muy adelantado era mi instituto experimental respecto a otros de mi ciudad. A estas clases acudíamos chicas y chicos y nunca se nos ocurrió pensar que los varones allí no pintaban nada, era de lo más normal. Con los años mirad lo que ha ocurrido con ellos ¡cómo han despuntado! ¡y cómo se nos derrumbó nuestra educación!

Pues bien, la receta de hoy está inspirada en el primer dulce que nos enseñó "la seño": Las bolitas  de coco. ¿Y qué llevaban estas bolitas…? ¡coco y leche condensada! para partirse el cráneo, jajaja. Seguro que alguno de vosotros las ha hecho alguna vez.

Les di un giro sencillo y elegante y las transformé en las barritas que ahora mismo os explico. Si además os gusta el coco vais a querer probarlas pronto. Me gusta hacerlas para Navidad pero vienen estupendas para tiempos de calores teniéndolas en el congelador, mis hijos las devoran.

Tenéis que perdonarme pues estos días estoy muy ocupada y apenas me queda tiempo libre para dedicarle al blog. En unos minutos os veo.

Ingredientes:

- Coco rallado 250 g.
- Leche condensada 350 g.
- Colorante alimentario rojo.

Elaboración:

 





Mezcla la leche condensada con el coco en un bol.






  
 

  


Sepárala en dos cuencos más pequeños, tinta con colorante rojo uno de ellos e integra bien para que coja color al parejo.







Cubre un molde rectangular (o cuadrado) con papel de horno engrasado (de tener spray desmoldante mejor, para que no coja sabores).​ Mi molde mide 18 x 20 cm.​

Extiende en el fondo del molde (sobre el papel), aplanando con la base de una cuchara, el coco sin colorear. Cubre bien los lados y procura que quede nivelado. Extiende encima el coco teñido y cúbrelo todo.



Introduce, tapando con film, en el congelador dos horas (esto es para que al cortar queden los bordes más definidos). Corta en porciones parejas.



Puedes tomarlas frías o del tiempo.





miércoles, 27 de abril de 2016

PATATAS A LA IMPORTANCIA


  


Hoy quiero dedicar esta receta de patatas, con algún toque diferente y personal, a mi fiel amiga Mª Dolores (Lola) del blog Con Sabor a Huerto que estos días pasados la publicaba.
Si os digo la verdad nunca me han faltado sus comentarios desde que nos conocimos, la admiro por su gran capacidad para darnos a todos un trocito de su tiempo, es una maravillosa persona. La admiro por muchas cosas, pero además porque nos hace fácil la cocina, sus recetas son tan especiales que es imposible resistirse a probarlas.

Acompaño esta entrada con una "patatilla saltarina" y divertida, espero que os guste mi idea, jajaja.

Y hablando del plato que os traigo cuenta la Wikipedia que este guiso de patatas es oriundo de la provincia de Palencia, también nos constata que se cocina mucho en Madrid, siendo además, un plato frecuente en restaurantes por ser muy demandado. Lo cierto, es que hace años que lo cocino y no sé de dónde me llegó la receta. Queda un plato excelente por su sabor, llena los estómagos y resulta muy económico. ¿Con tanta ventaja os animáis con él?

Ingredientes:

- Patatas regulares 5.
- Ajos 3 dientes.
- Azafrán unas hebras.
 - Perejil unas ramitas.
- Pimienta molida (opcional).
 - Cebolla ½.
 - Caldo de carne o pollo 1 litro.
- Vino de Jerez 1 vaso.
- Harina.
- Huevos.
- Aceite de oliva.

Elaboración:

Pela y lava las patatas. Corta en ruedas de un dedo de grosor.


 




Salpiméntalas y pásalas por harina.








Luego por huevo batido con algo de leche.








Fríe por tandas.








 





Retira y escurre el exceso de aceite sobre papel de cocina. Ponlas en una cacerola sin aceite.







Rehoga la cebolla muy menuda en una sartén. Añade una cucharada de harina y sofríe un par de minutos.

  
 




Maja los ajos, el perejil y el azafrán en un mortero. Pon algo de sal para facilitar el majado.







 


Añade la cebolla y el majado a las patatas.

Riega con el vino y deja unos minutos evaporar el alcohol. Después cubre con el caldo y cuece hasta que estén tiernas pero enteras. Para que no se rompan habrá que moverlas durante la cocción cimbreando la cacerola de izquierda a derecha, lo que ayudará a trabar la salsa.  





Servimos calientes.



sábado, 23 de abril de 2016

ROSQUILLAS DE MAMA INÉS



  Tenía muchas ganas de dedicar a mi querida amiga Belén, de El Toque de Belén, una receta, y cuando vi en su blog las rosquillas de Mama Inés supe que ésta sería la ideal por el significado especial que tiene para ella.
Estas rosquillas las hacía su madre, que tiene ahora ochenta años. Todos guardamos especial cariño por las recetas de nuestras madres y aunque tratemos de imitarlas, poniendo el alma en ellas, hay algo que hace que no nos sepan lo mismo, tienen un don especial.
Desde que empecé en este mundillo Belén ha estado conmigo acompañándome como una amiga incondicional, amable y cariñosa, humilde y cercana, quiero demostrarle mi admiración y respeto grande, porque ella es grande en todo lo que hace.
Las medidas que os doy las hace Inés con un vasito y nos dice Belén que es su referencia para hacerlas, la medida equivale a la capacidad del vasito.
Si os queda alguna duda pasáis por su blog que allí encontraréis lo que a mi me puede haber faltado.



Ingredientes:

- Huevos 2.
- Aceite de oliva 100 ml.
- Azúcar 100 g.
- Anís, un chorrito espléndido.
- Ralladura de una naranja.
- Zumo de ½ naranja.
- Bicarbonato 1 cdta.
- Harina, la que admita.
- Aceite para freír.
-Azúcar para emborrizar.
- Chocolate a la taza (opcional).



Elaboración:

Separar las claras de las yemas y batir las primeras a punto de nieve. Incorporar las yemas batidas con el azúcar. Batimos con un tenedor (yo lo hice con varillas y pienso que me fue peor) mientras añadimos los demás ingredientes. Incorporamos la harina al final y la ralladura, comprobamos que no se nos pegue a las manos, procurando que la masa no quede dura, más bien blandita.



 



Formar las rosquillas.

Freírlas en abundante aceite hasta dorar.







 

  



Pasar a papel absorbente y embadurnar en azúcar.
Podemos mojarlas en un buen chocolate a la taza.










jueves, 21 de abril de 2016

TORTA DE SEMILLAS DE AMAPOLA



  ¿Habéis probado las semillas de amapola? Descubrir sabores nuevos es algo apasionante. Yo las probé hace años, siempre dispuestas sobre alguna bollería salada o dulce, pero sólo una muestra pequeña que no me dejó apreciar exactamente a qué sabían. Leyendo entre mis libros de cocina vino a caer en mis manos una preparación común en los países del Este principalmente, en la cual las semillas tenían un papel protagonista, dada la cantidad de ellas que se ponían en el relleno de este bollo, o torta, que me pareció exagerada.


Me animé a prepararla, busqué las semillas y me puse manos a la obra sin saber en qué iba a quedar aquello. Después de mi experiencia, en la que me puse las botas pues me la comí casi sola, puedo contaros que me gustó, que la encontré especial, original y que su sabor terroso me recordó al del chocolate ¡qué sabor más extraño, me diréis, jajaja! para mí un descubrimiento muy agradable y nuevo.

Las semillas de amapola simbolizan abundancia y fertilidad, pronostican felicidad y buena suerte. "Las chicas solteras que las comen deben cortar amapolas si quieren casarse pronto".

Ingredientes para la masa:

- Harina 250 g.
- Leche tibia 125 ml.
- Mantequilla 75 g.
- Yemas de huevo 2.
- Levadura seca de panadero VAHINÉ 4,6 gr. (un sobre).
- Azúcar 3 cdas.
- Azúcar avainillada 5 g.
- Aceite de oliva suave 0,75 ml.
- Sal ½ cdta.



 Ingredientes para el relleno:

- Semillas de amapola 250 g.
- Azúcar 125 g.
- Pasas sin semillas 50 g.
- Nueces 25 g.
- Miel 25 ml.
- Mantequilla 25 g.
- Claras de huevo 2.
  
Azúcar glas y almendra crocanti para cubrir (opcional).

Elaboración:

En primer lugar hidratamos las semillas de amapola en agua hirviendo. Dejamos una hora aproximadamente dentro del agua.

Remojamos las pasas en agua templada. Reservamos.

Para preparar la masa de la torta empezamos disolviendo la levadura en un cuenco pequeño con la leche tibia, removemos y dejamos tapada media hora.

 




Mezclamos la harina y la sal, tamizadas, con los azúcares en un bol. Añadimos a esta mezcla las yemas, la mantequilla fundida (templada) y la levadura disuelta.






Amasamos dentro del mismo bol. Al principio os parecerá blanda pero enseguida y a medida que se va amasando se vuelve elástica y muy manejable. Cubrir el recipiente (untado con el aceite) con film y dejar levar en sitio cálido una media hora.





Escurrimos las semillas y las trituramos hasta que queden muy bien molidas, que parezcan una pasta fina. Añadimos a éstas las pasas, las nueces troceadas, la miel y el azúcar. Batimos una de las claras y la agregamos suavemente (nos servirá para amalgamar).






 


Extendemos la masa sobre una lámina de papel parafinado y con un rodillo formamos un rectángulo cuanto más fino mejor. Pincelamos la masa con la otra clara de huevo semibatida. Colocamos el relleno en el centro y plegamos hacia dentro los bordes haciéndola rodar y presionando en la unión (debe quedar bien cerrada para que no se nos salga el relleno). Volvemos a dejar levar, tapada con un paño, alrededor de media hora.




Precalentamos el horno a 180 ⁰C.


Horneamos de cuarenta y cinco a cincuenta minutos. Espolvoreamos con azúcar glas cuando se haya enfriado y esparcimos la almendra.





domingo, 17 de abril de 2016

POETAS (EX-POPIETAS) DE DORADA CON SALSA DE PIMIENTO Y TOMATE





No sé si a vosotros os apetecen ya estos platos, pues a mí nada más ver que se estabilizan los días soleados y  un tanto calurosos, me vienen deseos de cocinar las recetas propias de la estación, en la que incluyo el mismo verano.

¿Habrá algo más sabroso y fácil de hacer que estas popietas? Y algunos me diréis: ¿popietas?  ¡qué dice Alicia! Es un término culinario que aprendí de Arguiñano, jajaja, hace muuuuuuucho tiempo y que se refiere a los filetes que de cada pescado (generalmente mediano-grande) se obtienen después de dividirlos en dos por cada una de sus caras. Lo más cómodo para nosotros es que nos las preparen en la pescadería. El pescado deberá estar limpio de vísceras, raspas y desescamado. Os pido un favor no os vayáis de esta página sin leer los comentarios.

Para acompañar: "una salsa  mediterránea que pone a las doradas un punto muy agradable y especial".

Ingredientes:

- Doradas limpias y fileteadas.
- Huevos y leche.
- Pan rallado.
- Ajo en polvo.
- Estragón seco.
- Aceite de oliva.
- Sal y pimienta.
- Pimientos rojos.
- Pimientos verdes.
- Tomate natural de lata triturado (o tomates frescos aptos para fritura).
- Aceite de oliva.
- Azúcar.
- Sal.

Elaboración:

 



Poner un fondo de aceite en una sartén y sofreír los pimientos troceados al parejo. Cuando hayan reblandecido añadir el tomate, salar y agregar una cucharadita de azúcar. Dejar que reduzca a fuego medio.






 



Salpimentar y pasar cada filete de dorada por huevo batido y luego por pan rallado con ajo en polvo y estragón mezclados (añadirlos al gusto). Freír en aceite y colocar sobre papel absorbente.








Servir las ex-popietas acompañadas de su salsa.



jueves, 14 de abril de 2016

BERENJENAS AL HORNO



Seguro que os tienen que gustar estas berenjenas pues además de estar muy buenas, son súper fáciles de hacer y llevan ingredientes que solemos tener en casa. Cocinar en el horno es muy agradable y cómodo (aunque no lo pongo en duda, es un poco más caro) ¿qué os parece, entonces, si las dejamos para el fin de semana?

Quiero agradecer a mi amiga y compañera Alicia Gómez Meléndez su gran detalle conmigo, y por eso la nombro por aquí, para que los que aún no la conocéis paséis a visitarla y descubráis que tiene un blog fabuloso: Hogar y Ocio con recetas muy cuidadas y especiales, tiene ese ángel que hay que tener cuando se cocina, ella también lo es.


Ingredientes:

- Berenjenas frescas.
- Queso en daditos (dos variedades, por ejemplo, yo mezclo curado y tierno, oveja y vaca).
- Queso para gratinar rallado.
- Bacon ahumado en tiras.
- Tomates rojos.
- Albahaca.
- Aceite de oliva.
- Pimienta negra molida.
- Sal.


Elaboración:
 



Lavamos las berenjenas y sin quitarles la piel las dividimos en dos a lo largo. Encendemos el horno 180 ⁰C.

Las colocamos sobre una bandeja apta para horno untada de aceite, con la parte cortada hacia arriba. Les trazamos cortes longitudinales. Salpimentamos y regamos con un hilo de aceite.




Sofreímos el bacon hasta casi dorarlo. Mezclamos en un bol el bacon, los daditos de queso y algo de albahaca. Cubrimos con esta mezcla las berenjenas. Pelamos los tomates y los troceamos en dados pequeños. Ponemos encima, salando ligeramente.  Esparcimos el queso rallado y de nuevo regamos con un hilo de aceite.


Horneamos hasta que queden tiernas, aprox. 45 minutos.


Servimos calientes.



lunes, 11 de abril de 2016

TIROPITAKIA KURÚ (UN VIAJE POR TIERRAS GRIEGAS)




O empanadillas rellenas de queso.

Hace tiempo que no he hecho recetas de otros lugares y le tengo especial gana a las griegas. Los que me conocéis, y habéis ido siguiéndome desde que me inicié en este mundillo, recordaréis  algunas que he subido ya, las que me parecen más conocidas en nuestro país, tales como la musaka, los dolmades o tabaquitos y el tzatziki.

Hoy quiero dar oportunidad a estas deliciosas empanadillas con el queso más emblemático de Grecia, el queso Feta. He tomado de referencia algunas recetas que ya conocía y me he ayudado en especial de María Zannia para resolver algunas dudas.

El resultado a la vista queda y por lo demás tendréis que fiaros de mi criterio, han quedado crujientes y con un sabor muy agradable y fresco que les ha aportado la hierbabuena. Son muy fáciles de hacer, por ese particular no os desaniméis. La cocina griega nos sorprende siempre.


 


Ingredientes para la masa:

- Yogur griego (le he puesto yogur desnatado) 200 g.
- Mantequilla (a temperatura ambiente) 125 g.
- Sal 1 cdta.
- Harina de trigo 200 g.





Ingredientes para el relleno:

- Queso feta 120 g.
- Queso fresco granulado 100 g.
- Huevos M, 2.
- Hierbabuena fresca un buen manojo.
- Pimienta negra molida.
- Sésamo.

Elaboración:

Para preparar la masa ponemos en un bol el yogur, la mantequilla troceada y la sal. Mezclamos con un tenedor hasta que esté prácticamente todo integrado. Incorporamos poco a poco la harina, cuando se haga difícil mezclar, amasamos con la mano (dentro del bol) unos minutos hasta que nos quede una masa lisa y sin grumos. Dejamos reposar tapada con un paño mientras preparamos el relleno de las empanadillas.


Mezclamos con un tenedor en un plato uno de los huevos, los dos quesos y la hierbabuena picada. Aderezamos con  pimienta. Reservamos.


Encendemos el horno a 200 ⁰C.






Dividimos la masa en porciones de cuarenta gramos cada una aprox. Enharinamos la encimera y hacemos bolitas que luego aplastamos haciendo obleas.






Ponemos una cucharada del relleno en el centro y doblamos juntando los lados, presionamos con suavidad el contorno y sellamos los extremos con un tenedor (es conveniente que queden un poco enharinadas para que el tenedor no se enganche y para que luego nos sea más fácil desplazarlas a la bandeja de horno). Disponerlas en la bandeja con papel del horno en la base, pincelarlas con el otro huevo batido y esparcir semillas de sésamo.



Hornearlas hasta que se doren. Dejar templar y luego pasarlas a una bandeja.


Servir.




viernes, 8 de abril de 2016

MINITARTAS DE MANZANA





El hojaldre y la manzana se complementan maravillosamente. Seguro que os tienen que gustar estas minitartas de bocado, bueno de dos para los que tenemos "boquita de piñón", jajaja.

No sé dónde las vi, en un súper o en una pastelería, tampoco recuerdo si son exactamente así, pero fue verlas y se me antojaron. Pensé que no serían complicadas de hacer y estaba en lo cierto. No tendréis excusa para mañana, o pasado, daros un homenaje de fin de semana con ellas.

Cogí el hojaldre, que suelo tener en el frigo, y las manzanas y me puse manos a la obra, prometían un momento dulce para merendar.

A la vista os dejo lo que resultó de mi experimento. Las haré más veces pues están para comérselas de tres en tres.

 

Ingredientes:

- Hojaldre rectangular
- Manzanas
- Mermelada de albaricoque
- Azúcar
- Mantequilla
- Guindas para decorar
- Almendra crocanti para decorar (opcional).




Elaboración:

Extiende el hojaldre sobre el papel de fábrica. Corta redondeles con lo que tengas a mano y del tamaño que desees. Pincha varias veces el centro dejando un círculo alrededor sin pinchar.



 


Lava las manzanas y corta triangulitos. Superpón en el centro un par de ellos, más si el recorte es mayor. Pincela con huevo batido el círculo sin pinchar.

Pon algunos trocitos de mantequilla y espolvorea azúcar sobre la manzana.





Hornea  a 200 ⁰C en horno precalentado hasta que quede dorado el hojaldre.


 




Para dar brillo, ya horneadas, diluye mermelada con algo de zumo de limón y calienta unos segundos en el microondas. Pincela la superficie de cada minitarta.








Decora con guindas y si te apetece almendra crocanti.