Hace tiempo que publiqué el ajoblanco de almendras, que es
el clásico de la ciudad de Málaga, y de él puedo decir que es una maravilla de
sopa fría, inigualable por su sabor, textura, color, una joya gastronómica
según mi parecer. Es en verano cuando
echamos mano a ponerlo en nuestra mesa, como los gazpachos tradicionales. Cada
uno tiene su sitio y lo defienden como se merece.
Cuando en mi receta de hoy especifico "de harina de
habas" os indico que hay otros ajosblancos que no son de almendras, uno de
ellos es éste que se hace desde antaño (tal vez en tiempos de escasez, para
usar las habas que se quedaban secas) en la zona de Granada capital y provincia
y hacia el noroeste de la geografía, que incluyen ciudades malagueñas, como es
la bella ciudad de Antequera y zonas de Córdoba como la bonita ciudad de
Priego. Como veis abarca una extensión amplia que recoge tres provincias,
desconozco si en otros lugares también se hace.
Como buena sopa fría se ha servido en verano para aliviar
calores y lo común ha sido acompañarlo con pepino picado y rebanadas finitas de
pan, al menos en mi casa. Después he ido hablando con unos y otros,
sorprendiéndome cuando me he enterado con qué lo acompañan ¡ojo! echado en plan
barquitos dentro del ajoblanco, ingredientes que pueden ser de lo más
variopintos: patatas fritas, huevos fritos ¡ésto... un buque,jjj! sardinas en
aceite, uva moscatel, melón, cerezas...
La receta es algo discutida, algunos dicen que más pan y
menos harina, otros al contrario, yo le pongo igual proporción y me va bien,
sin abusar de cantidades. Os animo a prepararlo, sus amantes, que los tiene y
muchos, no pueden pasar sin él en verano.
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Como habréis visto he
cambiado mi foto de portada, para hacerla más fresquita como dije en Instagram.
A ver si así animo al tiempo y nos da un respiro.
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Ingredientes:
- Miga de pan de dos
o tres días 60 g.
- Harina de habas El
Molino 60 g.
- Ajo ½ (sin el germen).
- Aceite de oliva 6
cdas. soperas.
- Sal.
- Vinagre de Jerez 2
cdas. soperas.
- Agua muy fría 400
ml.
- Guarnición: la que tengáis a mano y ese
día se os antoje probar.
Elaboración:
Remoja la miga de pan y estruja. Mezcla el pan con la harina
de habas, el ajo (prudencia), el aceite, el vinagre y la sal. Añade un poco de
agua y tritura con la batidora hasta formar una papilla parecida a una mayonesa
espesa. Ve aclarando poco a poco hasta gastar el agua. Conserva en el frigo. Es
normal que se disgregue en el reposo, lo mismo le ocurre al ajoblanco de
almendras, debes remover antes de servir.
Acompaña con la guarnición elegida. En este caso os he dado dos versiones, con cerezas y con pepino, la más tradicional.
No tengo costumbre de hacer esta sopa fría tan popular en Málaga y tan rica y fresquita para el verano, aunque todo es cuestión de tiempo. Con ese aspecto tan apetecible que tiene no creo que tarde mucho en probarla.
ResponderEliminarMe gusta el nuevo aspecto de tu página, muy alegre.
Un beso.
Muy bonita portada Alicia, queda muy bien con la estación.
ResponderEliminarEste ajoblanco me ha encantado, no lo conocía de esta manera pero luce delicioso, además yo soy muy fanática de las sopas, frías o calientes y en cualquier estación, simplemente me encantan y ésta también me ha encantado
Besitos!!
Hola Alicia...
ResponderEliminarAl entrar creia que era otra Alicia...
Me gusta tu nueva foto de imagen...
Pero a mi me encantaba tu preciosa tetera...que me tenia enamora...
Aunaue si con el cambio uno se siente nejor...pues entonces a cambuar.
No sabia que tu abuela habia escrito un libro...que ilusio...no se si tú lo has visto.
Este ajoblanco es unz exquisitez...
Nunca lo habia visto con lo de las habas...
Te quedó de lujo.
Mil besosss guapaaaa.
Genial, el cambio de portada. Más colorido, más veraniego y refrescante, pero la tetera verde, me encantaba.
ResponderEliminarNo tenía ni idea de lo que cuentas sobre la historia de este gazpacho. La cocina no tiene fronteras, de hecho, las fronteras las han dibujado siempre los hombres, según sus intereses y por eso, tanto los platos, como las tradiciones culturales e incluso la forma de hablar, no entienden de fronteras.
Me has dejado boquiabierta, porque estaba deseando leer cómo preparabas la harina de habas y resulta, que ya viene lista.
Ahora mismo, con el fresquito que tengo por fin en la terraza, no me importaría, probar un vasito de tu ajoblanco.
Besos.
Alicia entre Priego y Granada te aseguro que también se hace porque mi abuela siempre lo ha hecho con las habas secas y le salía estupendamente. Me ha hecho mucha ilusión ver tu receta de hoy ¡que no se pierdan estas tradiciones!
ResponderEliminar(Es de Alcalá la Real, no sé si te sonará o lo conocerás)
¡Besos mil!
El cambio de portada me ha gustado, le da mucho color, muy ad hoc para el verano
¡Besos mil!
Alicia a mí me gusta probarlo todo, y más si son cosas como estas, tan tradicionales y apetecibles, porque llevas razón, el calor aunque nos esté dando una pequeña tregua hoy, augura ser largo durante todo el verano.
ResponderEliminarMe gusta la cabecera nueva, te lo comentaba en IG, los cambios suelen venir con novedades, y si son para mejorar, se agradecen.
Besos, disfruta de una feliz semana.
Nada más entrar en tu blog me he fijado en el cambio de foto de cabecera, me ha encantado!!
ResponderEliminarNo conozco la harina de habas, pero últimamente hay tantas variedades que tendré que buscarla en el súper. He probado el típico ajoblanco de almendras, pero seguro que este también está muy rico.
Besos.
¡¡Hola Alicia!! Me he fijado en tu cambio de portada y si que da una sensación refrescante, pues el color lila, que es el predominante, es un color frío, y el verde, es un color mediador, que depende el color que predomine, él se adapta. Pero, a pesar de ese color frío, la sensación es veraniega, pero fresca, que sabes que ahí, vas a estar comiendo tranquilo, a gusto y fresquito. Ya ves, lo que da de si una gama de colores, ja, ja.
ResponderEliminarBueno, yo no conocía esta harina de habas, no sé si le cambiará mucho el sabor al ajoblanco, supongo que la harina de almendras si le dará más sabor a almendras, pero vamos, es que creo que nunca he probado el ajoblanco, aunque sé que en algunos lugares es muy tradicional. Donde yo vivo, la gente no suele hacer ni gazpacho andaluz, somos muy poca gente los que lo hacemos y los que lo consumen lo suelen comprar de brick, porque siempre que voy a comprar tomates rojos y maduros la gente me pregunta para qué los quiero así, tan maduros, y cuando les digo que para gazpacho, todos se asombran. Eso si, horchata, todo el mundo tiene en la nevera, ja, ja.
Bueno, sea normal, con harina de almendras o con harina de habas, este plato tan fresquito, tiene que estar muy rico. Besitos.
Me gusta tu cambio de look , nunca he probado hacer el ajo blanco con harina de habas , asi que tendre que buscar esta harina y probarlo besitos
ResponderEliminarHola, veo que vienes con cambio de cabecera. Es preciosa, con mucho gusto!! En cuanto a este ajo blanco , no lo he probado, me apetece mucho aunque no sé si a mi familia le va a gustar. A mí, seguro que me encanta. Quizás lo haga sin decir de qué es. un beso !!
ResponderEliminarHola guapísima !!!
ResponderEliminarMe encanta el ajoblanco mi querida Alicia, y aunque lo tengo publicado con harina de almendras y es un plato que me trae muy buenos recuerdos, con harina de habas que también lo he comido, me gusta casi a la par. Estuve hace años en una boda en Andújar y nos lo pusieron como el tuyo, hoy me hubiera tomado una jarra tamaño XXL porque con la calor no apetecen más que platos así de fríos y ricos.
El cabecero nuevo me encanta, el colorista, y precioso. Veo la mesa puesta para dos comensales, pues en frente tuya me sentaba ahora mismo, y me ponía las botas.
Besotes gordos mi niña.
Nunca he probado la harina de habas, pero sí el ajoblanco y me encanta. Me quedo por tu blog descubriendo más recetas. Un besote desde La Cuchara en la Maleta!!
ResponderEliminar¡Hola Alicia! Es la primera vez que veo harina de habas ajo blanco. Esta receta me parece muy sencilla y original, así que la probaremos. ¡Un saludo y buen verano!
ResponderEliminarHola Alicia
ResponderEliminarHe comido la sopa clásica de ajo blanco y la verdad es que esta buenísima. En mi casa el ajoblanco lo quieren de untar y es el que suelo hacer más veces. Para serte sincera nunca lo había visto como el tuyo, de harina de habas, seguro que queda igual de rico, desde luego un vaso me tomaba yo ahora mismo, se ve de lo más apetecible.
Un beso.
Hola Alicia, la portada te ha quedado bonita, elegante y veraniega, me ha encantado. Ignoraba que existía la harina de habas, y que con ella se podía hacer esta delicia de plato. Me ha gustado leer tus explicaciones del inicio de la entrada. A ver si refresca un poco, en Barcelona con la humedad el calor es sofocante. Besos.
ResponderEliminarAlicia me encanta tu nueva imagen para el blog, de verdad muchísimo es preciosa, buen cambio!!
ResponderEliminarNo conocía esta harina, ya he aprendido algo nuevo por hoy, tiene buena pinta ese ajo blanco.
Un beso
¡¡¡Hola Alicia!!! Enhorabuena por la re-decoración, es muy agradable y acogedora. En cuanto a tu propuesta de hoy, es ideal. El calor aprieta, y hacer acopio de buenas sopas frías, viene fenomenal. Feliz finde, bstes.
ResponderEliminarHola Alicia, me gusta mucho la nueva imagen que estas dando al blog, queda fantástico y muy bonito ! La receta desconocía y está genial aprender sonre la harina de habas, nunca la he visto, gracias por compartirlo, un beso y a aguantar las calores... :)
ResponderEliminarYo lo hago con esa misma harina de habas cuando puedo conseguirla. Cuando paso por Andalucía en muchas tiendas de pueblos se encuentra pero cada vez es más difícil porque la gente esta perdiendo la costumbre de usarla.
ResponderEliminarEn cuanto a los ingredientes yo le meto 4 dientes de ajo. El secreto para que no repitan está en laminar los previamente, los echo en un vaso y los cubro de vinagre un rato para que pierdan su potencia. Luego ya los uso normalmente tras lavarlos con agua.