¡Hola, Bienvenidos!

¡Hola amigos!


Os abro encantada las páginas de este blog. ¡Bienvenidos!

La cocina para mí es entretenimiento, un motivo para relajarme, expresarme, experimentar y hacer disfrutar a quienes prueban mi comida; incondicionales mi familia y amigos (siempre muy agradecidos), tengo motivos para poner pasión en cada uno de los platos que hago, ojalá logre transmitírosla.


Lo dedico a mi madre.

jueves, 31 de marzo de 2016

CROQUETAS DE ALCACHOFA




 Las croquetas son muy versátiles, se prestan para todo tipo de ingredientes. A lo largo del tiempo que he estado con vosotr@s he hecho distintas cada vez y aún me quedan más en el tintero que os iré trayendo en sucesivas entradas. Éstas de hoy no desmerecen, todo lo contrario, son muy especiales. No podía quedarme sin dejaros la receta, ya que de sobra sabéis que si tengo una buena receta, que es considerada por mí como tal, me parece que hago mal si no os la cuento. Sé que a muchos os encantan las alcachofas, hay menos que no las quieren, siendo la minoría.

Gustándome a mí las alcachofas estas croquetas son unas de mis favoritas. Para hacerlas pensé que si a las espinacas se les suelen poner piñones y pasas  ¿por qué a las alcachofas no? probé y el éxito fue rotundo. Al ser las alcachofas un tanto amargas les van divinamente las pasas pues neutralizan su amargor. Unos piñoncitos tostados como guarnición, una croqueta y un piñón a la boca ¡y vaya chicos y chicas! ¡para derretiiiiiiiiirse!

Ingredientes:

- Alcachofas cocidas 5.
- Media cebolla.
- Un puñado generoso de piñones.
- Un puñado de pasas sin huesos.
- Un vasito de harina.
- 4 vasitos de leche.
- Sal.
- Pimienta blanca molida (opcional).
- Aceite de oliva. 4 cdas.
- Mantequilla 1 cda.
- Rebozado común: harina, huevo batido, pan rallado.
- Aceite para freír.

Elaboración.


 



Limpiar las alcachofas, lavarlas y ponerlas a cocer cubiertas de agua con una cucharada de sal. Dejar cocer, tapadas, media hora o hasta que se hayan reblandecido. Dejar enfriar, escurrir del agua presionándolas sin romper. Trocear menudas.






 




Tostar los piñones en una sartén sin nada de aceite. Moverlos continuamente para que se doren al parejo. Reservarlos.





  

Pochar la cebolla cortada pequeña con un poco de sal y añadir las pasas para que se rehoguen con ella.



Incorporar las alcachofas troceadas. Rehogar un par de minutos y agregar después la harina haciéndola otro par de minutos. Cuidad que no se agarre al fondo, para ello mantendremos el fuego medio. Añadir la leche fría. Probar de sal. Remover todo el tiempo hasta que la masa se deslice suavemente de la sartén, entonces ponemos la mitad de los piñones y la mantequilla, mezclamos. Volcamos en una bandeja y esperamos que enfríe o temple para poder liarlas (aunque todo el mundo aconseja que se deje enfriar totalmente yo no suelo hacerlo así, las envuelvo estando aún la masa tibia lo que me ayuda a moldearlas mejor, ya sabéis: "cada maestrillo...").



Moldeamos, las pasamos por harina, luego por huevo batido, aclarado con un poco de leche, y por último por pan rallado.


Las freímos de pocas en pocas cubiertas en aceite caliente, pero no hirviendo. Les quitamos el exceso de aceite sobre papel de cocina y las servimos acompañadas de la otra mitad de los piñones.





martes, 29 de marzo de 2016

ALBONDIGUITAS DE PINTARROJA CON PARMENTIÈRE BICOLOR




De nuevo estoy con vosotr@s, en estos días espero y deseo que os haya ido la vida fenomenal. Vuelvo a la carga con una receta curiosa, pero no menos buena. Si tenéis oportunidad no dejéis de probarla.


Esta receta surgió de un día que me regalaron pintarroja. Este pescado es muy común por la zona donde vivo y apreciado por sus gentes. Motu proprio no se me ha ocurrido nunca comprarlo, aunque lo he visto por los mercados, su aspecto no me parece llamativo ni atrayente, pero confieso que lo he comido frito, adobado y seco (al estilo del bacalao) servido como tapa para acompañar la cerveza.

¿Qué es la pintarroja? Algunos no sabréis que se trata de un tiburón, tiburón gato concretamente, el nombre lo debe a sus ojos rasgados, aunque yo habría apostado mejor por clasificarla dentro de los ofidios (más parece una serpiente), jajaja, lo digo porque su silueta es alargada, puede llegar a medir hasta 70 cm. Lo más fácil en encontrarla en los mercados ya desprovista de su piel que se me hace es un tanto difícil de desprender, es rugosa, moteada de amarillo, pardo y blanco.

La pintarroja es de hábitos nocturnos y vive en los fondos marinos, alimentándose de moluscos, crustáceos y cefalópodos.

Mi experiencia ha sido positiva por el sabor tan agradable que tiene. Estoy satisfecha, pues de ella he sacado un plato muy del gusto de todos.

Ingredientes:

- Pintarroja limpia de piel 350 g.
- Pan del día anterior 4-5 rebanadas.
- Huevos L 1.
- Cebolla en polvo 1 cda. sopera.
- Sal y pimienta blanca molida.
- Aceite de oliva para freír las albondiguitas.
- Patatas blancas 2 medianas.
- Patatas violeta 7-8.
- Puerros 1.
- Caldo de jamón o pollo casero o de brick 1 litro.
- Leche 250 ml.
- Sal (si se necesita).
- Mantequilla 2 cdas. soperas.

Elaboración:

Trocear la pintarroja ya limpia de pieles y vísceras. Lavar.


 



Poner una cacerola al fuego con el caldo de jamón y la leche.  Blanquear el pescado cinco minutos y retirarlo a un plato. Cuando temple desmenuzarlo, cuidando de que no queden raspas.







Dividimos el caldo (en el caso de que pareciera no haber suficiente para la cocción, añadir algo más de caldo de jamón o leche) en dos cazos independientes y cocemos troceadas las patatas, en uno las blancas y en otro las violeta. Incorporamos medio puerro en cada cazo. Comprobad el punto pinchándolas con un tenedor. 
  

Preparar la masa de albóndigas con el pescado desmenuzado, el huevo, el pan remojado y estrujado y la cebolla en polvo. Sazonar. Redondear y freír sin enharinar.


Triturar las patatas por separado con una cucharada de mantequilla en cada una. Poner a punto de sal si es necesario.

Disponer las parmentières en una bandeja o plato y colocar las albondiguitas encima. Servir caliente.


Si os sobró algo de caldo no lo tiréis, coladlo y tendréis una sopa deliciosa para cenar.


domingo, 20 de marzo de 2016

LECHE FRITA




Queridos amigos voy a tomarme un breve descanso, ya sabéis que en vacaciones tengo más lío en casa. En pocos días volveré a publicar mis recetas, algunas  están ya a la espera deseando salir y que las conozcáis.

Os mando a tod@s mis mejores deseos y no se me ha ocurrido mejor manera de hacerlo que con  otra receta dulce, muy típica, pero con unos toquecillos diferentes, con sabor a lo antiguo, que a los que los sabéis apreciar os va a encantar.

Me despido con humor recordando a mi padre al que le gustaba, cuando éramos pequeños, ilustrarnos la Semana Santa así. Creo que todos mis hermanos se acuerdan ,jajaja.


Tarareadlo entonando como los tambores y cornetas de las bandas de las procesiones.

¡Hasta pronto!





Ingredientes:

- Leche de cabra 1 litro.
- Maizena 80 g.
- Cáscara de limón.
- Canela en rama 1.
- Huevos batidos L, 2.
- Pan rallado.
- Azúcar y canela molida para emborrizar.
- Aceite de oliva para freír.




Elaboración:

 




Separa una taza del total de la leche fría, el resto ponlo a calentar en una cacerola con la cáscara de limón y la rama de canela. No pongas azúcar.







 





En la taza separada echa los ochenta gramos de Maizena y diluye perfectamente.







Hierve la leche de la cacerola y apaga el fuego tapando y dejando que infusione una hora. Retira la canela y la cáscara de limón, cuela la leche.

 




Vuelve al fuego y cuando esté caliente vuelca la leche con la Maizena y mueve sin parar con unas varillas hasta que espese y no queden grumos.






  
Vierte la mezcla en una bandeja rectangular. Cuando temple la metes en el frigo y dejas que enfríe totalmente.







Saca con cuidado dando la vuelta sobre un papel de horno.







Trocea en cuadrados regulares no demasiado grandes. Es una masa delicada y hay que manejarla con tacto.

Pasa cada trozo por huevo y luego por pan rallado. Fríe en abundante aceite, girando para que se haga por los dos lados.  Ponla sobre papel de cocina unos instantes y luego emborriza en azúcar con canela.

  

Servimos templadas o frías.





jueves, 17 de marzo de 2016

BUÑUELOS DE MANZANA





Estuve pensando el año pasado en daros esta receta, pero luego se me pasó. ¡Se me pasan tantas cosas!

Y ahora que de nuevo nos encontramos de sopetón, como aquel que dice en Semana Santa, y siendo ésta una receta la mar de apropiada para la fecha, ya no la dejo pasar más.

¿Se os han quedado olvidadas un par de manzanas en el frutero "mustias y tristes" jajaja, o en aquella esquina del cajón del frigo, medio congeladas? ¡Pues no las tiréis! ¡Aprovechadlas! que ya veréis lo buenísimas que están y lo lucidas que quedan preparándolas como buñuelos.


Ingredientes para dos manzanas:

- Manzanas golden 2.
- Harina de fuerza 150 g.
- Aceite de oliva 2 cdas. soperas.
- Agua 8 cdas. soperas.
- Esencia de vainilla (si la tenéis) unas gotas.
- Huevos 2 enteros y una clara.
- Royal (polvos de hornear) 2 cdtas.
- Sal una pizca.
- Aceite abundante para freír.
- Rebozado de azúcar y canela.

  
Elaboración:

Lavar las manzanas y taladrarlas con el ahuecador, para vaciarlas de las semillas.



 


Preparar la pasta de los buñuelos mezclando la harina con la sal y la levadura. Añadir la esencia de vainilla, el aceite y el agua. Batir los huevos enteros y agregarlos batiendo un rato para que se integren bien los ingredientes y no queden grumos. Incorporar por último la clara montada a punto de nieve y mezclar con cuidado para que no se baje demasiado.





Pelar las manzanas y cortarlas en ruedas de un dedo de grosor aprox. dejando el agujero en el centro.
  




Mientras se calienta el aceite, vamos remojando las rodajas de manzana en la pasta y las echamos con el aceite caliente, no hirviendo. Limpiar cada vez con el canto de un cuchillo (si se necesita) los flecos que caen de la pasta al retirar cada rodaja.





Dorarlas por los dos lados y pasarlas a un papel de cocina. 


 





Antes de que se enfríen rebozarlas en una mezcla de azúcar y canela.
Os aconsejo tomarlas templadas, si se enfrían y más de un día para otro quedarán gomosas.










¿Que os ha quedado algo de pasta de buñuelos? Cortar unas rodajas de cebolla, dejarlas un momento embadurnadas y freírlas en el mismo aceite. Servirlas como aperitivo o acompañamiento para la comida. Ponedles sal por encima una vez fritas y un pelín de salsa brava.



lunes, 14 de marzo de 2016

RISOTTO DE CALABAZA Y ENSALADA




Hoy haremos un risotto, pero sin complicaciones, no más de las necesarias. Para los que aún no habéis hecho este plato os cuento algo de lo que sé de él por la Wikipedia.  Es una comida tradicional italiana a base de arroz al que se le añade queso parmesano, aunque también otros quesos. Es originario del norte de Italia y su pilar gastronómico. Requiere de un arroz con unas cualidades especiales, ha de ser de grano pequeño o medio y debe tener capacidad de absorción de líquido para obtener una textura cremosa. Hay muchas variedades como Maratelli, Carnaroli y Vialona Nano; y otras más usadas como Arborio, Baldo, Padano, Roma...

Es famoso el risotto Milanés, de intenso color amarillo por llevar azafrán. Estos arroces pueden elaborarse con ingredientes muy variados. En italiano llamaríamos a mi plato: "Risotto a la Zucca". ¡Suena bien! ¿Cómo sabrá? A nosotros muy bueno.


Ingredientes:

- Aceite de oliva 3 cdas. soperas.
- Mantequilla 3 cdas. soperas.
- Calabaza 500 g.
- Boletus desecados 20 gr. (opcional).
- Arroz especial risotto 200 g.
- Vino blanco tipo jerez 65 ml.
- Caldo de carne 460 ml.
- Parmesano en lascas 50 g.
- Mantequilla 2 cdas. soperas.
- Pimienta blanca molida.
- Sal (si se necesita).

Elaboración:

Hidratar las setas un rato antes en agua, y después, a la hora de usar escurrirlas del agua.

En tres cucharadas de aceite y tres de mantequilla sofreír a daditos la calabaza limpia. El fuego lo mantendremos todo el tiempo de medio a bajo.

Cuando se haya ablandado la calabaza, no deshecho, añadimos las setas y el arroz y lo sofreímos unos minutos.




 



A continuación echamos el vino y lo dejamos evaporar moviendo. Hervir el caldo de carne (de no disponer de él podréis poner en su lugar dos pastillas y disolverlas en medio litro de agua).







 


Agregar al arroz el caldo hirviendo con un cucharón, poner dos cada vez y entre añadidura y añadidura dejar que se consuma sin parar de mover (a fuego bajo). Comprobad el estado del arroz probando el grano, que suele estar en su punto alrededor de los quince, veinte minutos desde que empezamos a añadir el caldo.









Al retirar, incorporamos el parmesano y las otras dos cucharadas de mantequilla, removemos bien.







Servimos enseguida. Mi consejo es que os cuidéis con la sal pues el caldo y el queso ya se encargan de esto.



  
Para acompañarlo, os sugiero esta deliciosa ensalada.



Ingredientes:

- Naranjas 3.
- Aguacate 1.
- Nueces.
- Granada.
- Zumo de lima.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal.

Elaboración:

Pelar las naranjas, cortarlas en rodajas, quitar los huesos (de tenerlos) y distribuirlas a vuestro gusto en una bandeja.

Pelar y cortar en láminas el aguacate y rociar enseguida con zumo de lima. Alternar con la naranja.

Esparcir granos de granada y nueces por encima.


Salar, regad generosamente con aceite de oliva y a vuestro gusto más zumo de lima. Servir del tiempo.



sábado, 12 de marzo de 2016

FRESAS CON YOGUR GRIEGO



No es propiamente una receta, se trata de combinar de manera bonita el yogur con la fruta. Para realzar el sabor y convertirlo en un mejor postre lo alegré añadiendo crocanti de almendra y un "chorritín" de caramelo líquido, de ese mismo que tenéis para el flan. Después de una comida pesada me parece fenomenal tomar postres de este tipo que son más ligeros que otros y por lo tanto cargan menos ¿no pensáis lo mismo? Sin elaboraciones largas y complicadas un postre que sorprende por su belleza.

Ingredientes:

- Fresas.
- Yogur griego edulcorado (por restar algo de calorías).
- Almendra crocanti.
- Caramelo líquido.

Elaboración.

Poner una base de yogur en el fondo de unas copas o vasos bonitos. Lavar y cortar las fresas en láminas de mediano grosor, procurando igualarlas. Colocarlas en línea alrededor, haciendo un círculo. Rellenar con más yogur. Salpicar la almendra y rociar con el caramelo. Guardar en el frigo hasta el momento de servir.





miércoles, 9 de marzo de 2016

MINI-TOSTAS DE NARANJA CON SARDINAS PICANTONAS





¿Le apetecen a alguien estas mini-tostas? Subo esta receta a petición de mis amigas  que me piden ideas para aperitivos y al ser ésta muy buena y fácil de preparar, la he elegido hoy para que así la tengan en cuenta en su próxima reunión.

Es importante que se consuman pronto pues tienden, como muchos aperitivos de esta clase, a oxidarse y a reblandecer el pan. Debéis dejar preparado todo a falta de untar las tostas y decorarlas,  no demorándose en servirlas ¡tampoco hay que meterlas en la boca de los invitados a empellones! jajaja. Este inciso se lo dedico a mi amiga Nuria Eme que sé que le divierten estas tonterías mías. Aprovecharé, que me viene a colación pues Nuria ha estado desaparecida durante un tiempo, para mandar un mensaje de ánimo a dos blogueras compañeras que echamos en falta. Os esperamos pronto, Inma Vega y Silvia Gómez. Estaréis de acuerdo conmigo en que son "piezas importantes  de este mundillo".

Muchos besos para mi querida amiga Mónica del blog Dulcibal.




Ingredientes:


- Rebanadas finas y tostadas de pan del día anterior.
- Tapenade.
- Gajos de naranja pelados y sin huesos 1 por tosta.
- Sardinas picantonas Hacendado 1 por tosta.
- Alcaparras y hojas de menta para decorar.
 


Para el tapenade (da como para veinte tostas, si son pequeñas como las mías):

- Aceitunas negras (o verdes) sin hueso 15-20.
- Salmón ahumado (lo he sustituido por las anchoas)2 lonchas medianas.
- Ajo ½ (retirar la hebra central).
- Mostaza 1 cdta.
- Alcaparras 1 cdta. + una para cada tosta.
- Aceite de oliva 2 cdas.
- Orégano 1 cdta.




Elaboración:

Batir los ingredientes del tapenade, dejando algunas alcaparras para decorar. Untar sobre el pan una capa no muy gruesa. Si os sobra siempre habrá lugar para gastarlo.

Colocar los gajos de naranja sin pieles (y sin huesos de tenerlos), alineados, y también las sardinas.


Decorar con alcaparras y hojas de menta. Regar con algo de aceite de la lata. Servirlas enseguida.





domingo, 6 de marzo de 2016

PANECILLOS CARACOLA




Tengo una fan de mis panecillos, no sólo de éstos que hoy os traigo ¡¡¡le gustan todos!!! Para ella es día de fiesta si hay panecillos. Probablemente ese día será lo que más coma y dejará lo demás para darse su pequeño atracón. Pero hacer pan lleva su tiempo, hay que estar pendientes de levados y amasados, ese día nos tenemos que olvidar de otras cosas, al menos es mi caso, por eso los voy dejando y dejando. Ya sabía yo que le daría una alegría inmensa cuando al llegar a casa se encontrara con ellos, recién horneados, dispuestos en la panera y desprendiendo aromas hasta la puerta de la calle. 

Esa persona es mi hija a quien le dedico hoy esta entrada, con todo mi cariño por ser una chica soñadora, que piensa que aún el mundo se puede mejorar, que odia las injusticias, que se entrega en cuerpo y alma a lo que hace; eso sí, muy impulsiva, lo que a veces le gasta malas pasadas por creer en quien no debe, es muy confiada y las personas no son todas de fiar. Le doy las gracias por ser mi hija y como premio ¡una de panecillos!

Ingredientes:

Leche entera 150 ml. (se apartan tres cdas.  para diluir la levadura).
Harina de fuerza 550 g.
Levadura seca 3 cdtas.
Mantequilla 60 g.
Huevos tamaño L, 2 + 1 yema para pincelar.
Semillas de amapola.
Sal 2 cdtas.
Azúcar 1 cda.

Elaboración:







Calentar la leche y añadirle la mantequilla y el azúcar. Reservar.












Disolver la levadura en las tres cucharadas de leche tibia que hemos apartado y dejar reposar tapada diez minutos.







 



Batir los huevos. Incorporamos la leche con la mantequilla y azúcar, diluimos, y añadimos la levadura. Poco a poco integramos la harina con la sal haciendo una masa homogénea.







 



Pasamos a la encimera (si no se pega no es necesario ponerle harina) y la amasamos diez minutos. Hacemos una bola y  dejamos en un recipiente ligeramente aceitado tapada con film, para que leve alrededor de una hora y media en un sitio cálido.






Desgasificamos y porcionamos en doce trozos. Formamos con cada trozo cilindros alargados, de algo más de un dedo de gruesos, haciéndolos rodar por la mesa y después los enrollamos en espiral para formar caracolas. Metemos los extremos por debajo y los presionamos. Colocamos sobre una bandeja de horno y los dejamos que leven de nuevo, al menos media hora y en sitio cálido.



Mientras, encendemos el horno a 220 ⁰C.

 




Pincelamos con la yema batida diluida en algo de agua. Esparcimos las semillas de amapola y los metemos al horno para que se doren alrededor de quince minutos.






 





Aireamos sobre una rejilla y listos para comer.








Mi fuente ha sido: C. Bretherton.