¡Hola, Bienvenidos!

¡Hola amigos!


Os abro encantada las páginas de este blog. ¡Bienvenidos!

La cocina para mí es entretenimiento, un motivo para relajarme, expresarme, experimentar y hacer disfrutar a quienes prueban mi comida; incondicionales mi familia y amigos (siempre muy agradecidos), tengo motivos para poner pasión en cada uno de los platos que hago, ojalá logre transmitírosla.


Lo dedico a mi madre.

jueves, 30 de marzo de 2017

BACALAO CONFITADO CON REVUELTO DE SALICORNIAS




Había oído hablar de las salicornias, pero no había tenido el placer de probarlas. Os animo a hacerlo si sois como yo "una catacaldos" (pero delicada ¡eh!) jajaja.

La primera vez que las comí fue en un restaurante, no hace mucho tiempo, pregunté  lo que era aquello que tenía un sabor salino muy agradable y que me quería recordar, por su aspecto, a unos endebles espárragos medio desarrollados ¡y claro! como es que cada día están saliendo cosas nuevas e insospechadas al mercado, me surgieron dudas sobre lo que me estaba llevando a la boca. Después de preguntar, cuando medio pude entender lo que decía nuestro camarero (no era español), sumado a que cuando oyes por primera vez una palabra algo enrevesada necesitas, por fuerza, afinar la oreja para quedarte con el nombre, supe que lo había oído en alguna parte. Luego en casa me instruí.

Después pensé en un plato y de resultas de ello salió esta combinación que os puede gustar, aquí en casa triunfó, no menos por llevar un acompañamiento perfecto como es este bacalao confitado.

Por si queréis saber algo de la planta, Salicornias.

Con la amabilidad de Cómete el Mar y de la mano de mi amiga Isabel Mauri dispongo hoy para mi plato de este exquisito ingrediente. Si os apetece probar os dejo la dirección o enlace.

Ingredientes:

- Lomos de bacalao al punto de sal, 1 por persona.
- Aceite de oliva, suficiente para que el bacalao quede sumergido completamente.
- Ajos, 2 dientes.
- Laurel, 2 hojas.
- Salicornias 200 g.
- Puerros 1.
- Zanahorias 2.
- Huevos 4.
- Aceitunas negras (optativo)
- Pimienta blanca molida.
- Sal (si es necesaria).

Elaboración:

En un recipiente de paredes altas, y no muy amplio, calienta el aceite con unos ajos aplastados, con piel y unas hojas de laurel, después apaga el fuego. Retira los ajos y el laurel y sumerge el bacalao con la piel hacia abajo, que quede tapado, vuelve a poner en el fuego. No debe exceder de ochenta grados, según los entendidos. De no disponer de un termómetro vigila que no hierva, de querer hacerlo retira el recipiente y luego pon de nuevo, es preferible mantener  baja la llama. Dependiendo del grosor del bacalao tendrá más o menos tiempo de confitado. En quince minutos tuve yo el mío.


Mientras, prepara para hacer el revuelto, cortando puerro y zanahoria en tiras finas. Enjuaga las salicornias bajo el grifo. Saltea éstas últimas en un aceite aromatizado con ajo, retira el ajo e incorpora el puerro y la zanahoria, previamente blanqueados dos minutos en agua hirviendo (no poner sal). Mezcla todo y añade un polvillo de pimienta blanca.

Bate los huevos, comprueba de sal. Cuaja a tu gusto.


Si decides servir individualmente dispón el revuelto en el fondo de los platos y coloca el bacalao encima. Sirve caliente.



lunes, 27 de marzo de 2017

POTAJITO DE GARBANZOS CON COCOCHAS DE BACALAO




El potaje de garbanzos o potaje de vigilia es uno de mis platos favoritos,  más aún de mi marido. Lo clásico es tomarlo en las fechas en las que estamos, en otras se relega al olvido. Ya no hay razones de peso para hacerlo pues el bacalao lo podemos comprar durante todo el año.  Yo lo hago cada vez que se me antoja y que me lo piden ¿Por qué renunciar a este plato tan sabroso y sano durante un año entero?

Pero esta vez os traigo una manera de hacerlo diferente, mejor todavía, sin restar méritos al otro (que ya veis lo estoy celebrando) ¿Queréis encontrar sabor a mar en cada cucharada que os llevéis a la boca? Seguid mis pasos y os aseguro que os fascinará ¡claro si os gustan las cocochas!

Ingredientes:

- Garbanzos 250-300 g.
- Cocochas de bacalao saladas, una docena.
- Cebolla grande 1.
- Apio unas ramas.
- Zanahorias 2.
- Laurel 1 hoja.
- Pimentón de la Vera 1 cda.
- Azafrán en hebra.
- Cubito de pescado Knorr, 1 (optativo).
- Pimienta negra molida.
- Perejil.
- Aceite de oliva.
- Sal.

Elaboración:

Lava las cocochas bajo el grifo y desprende toda la sal. Sumerge en agua fría y ponlas en el frigo treinta horas (aprox.) cambiando el agua cuatro veces en ese tiempo. No tires la última agua de remojo pues la necesitaremos para el guiso.

La noche antes de cocinar deja en agua los garbanzos, bien cubiertos.

Pon agua limpia (no excederse) al fuego, más el agua del remojo de las cocochas y echa las verduras, sólo media cebolla, el laurel, la pimienta y la pastilla de caldo. Cuando rompa a hervir incorpora los garbanzos. Cuece en olla convencional.

Con un fondo (cuatro cdas.) de aceite de oliva rehoga a fuego fuerte las cocochas por ambos lados. Retira y si es necesario agrega algo más de aceite. Rehoga ahí mismo la otra media cebolla cortada pequeña, dorada ya, incorpora el pimentón y da un par de vueltas al conjunto. Tuesta aparte unas hebras de azafrán e  incorpóralas también.




 


A media cocción de los garbanzos vuelca el sofrito y mezcla. Continúa la cocción hasta que se haya ablandado la legumbre.

Tritura la cebolla y pica en daditos las zanahorias. La consistencia debe ser media, más bien tirando a espesa para que concentre los sabores. Pon a punto de sal.



Deja reposar unos minutos antes de servir. Sirve con perejil picado por encima.




Otra opción de servir es esta, con guarnición de langostinos a la plancha: Ummmmmmmm.



viernes, 24 de marzo de 2017

GALLETAS PUZZLE DE ELEFANTES Y CORAZONES DE MERMELADA


Elefantes muy bien ambientados en su sabana.        


Estas galletas hace tiempo que las hice y me apremia subirlas al blog porque ya las publiqué en Instagram hace algunos días. ¿Qué queréis que os diga? ¡A vosotros os pasará igual! A veces no viene el tiempo como quisiéramos y se quedan rezagadas muchas cosas a nuestro pesar.

Tenía en un papelito apuntada la receta de estas galletas, soy un caso, lo sé, pues tengo infinidad de ellos por todos los sitios posibles de guardar, se ha convertido en algo habitual en mi vida. Pensé que podrían salir bien y aprovechando un regalo de Reyes de mi hija Marina me propuse "ponerlas a funcionar". Hoy os traigo el resultado de esas galletas con ese molde tan particular, que es en suma lo más original. Tenía que gastar el resto de pasta sobrante y como para más elefantes no había, jajaja, decidí emplearla en unos corazones de mermelada, creo que os pueden gustar. Os lo enseño.

Ingredientes:

- Harina de repostería 250 g.
- Mantequilla salada 100.
- Azúcar blanquilla 100 g.
- Huevos 1 + yema para barnizar.
- Jerez seco ½ vasito (es solo un toque).
- Impulsor ½ cdta.
- Azúcar glas.
- Mermelada de frambuesa.

Elaboración:

Bate el huevo con el azúcar, añade la mantequilla a temperatura ambiente, el Jerez y la harina tamizada por último. Mezcla sin amasar.


Forma una bola con esta pasta y envuélvela en papel film poniéndola en el frigo, al menos media hora.

Enciende el horno a 180 ⁰C.

Utiliza una porción de la pasta y extiéndela en la encimera con un rodillo y entre dos papeles de horno, el resto déjala al frío. La receta aconseja enharinar ligeramente la encimera, yo no lo he hecho pues no lo he necesitado, si ves que se pega rocía un poco por encima y así te aseguras. Proporciona el grosor alrededor de medio centímetro.

Elige un cortapastas de tu gusto, y corta las piezas. Disponlas sobre papel de horno y sobre la bandeja. Pincela con la yema batida.

  

Hornea de 10 a 12 minutos. Deja enfriar y luego engarza las piezas. En este punto te encontrarás con lo más y lo menos pues habrá que haber tenido en cuenta que las galletas crecen al hornear y que por consiguiente la incisión que hace de enganche se puede cerrar o puede quedar holgada ¿Qué hacer? pues con mucho cuidado y mimo, para no romperlas, y en el primer caso, raspa con una hoja de cuchillito afilado los bordes internos hasta que encajen y no caigan. De quedar holgadas las piezas funde un poco de chocolate blanco para aumentar la pieza y deja solidificar en el frigo.


Decora a tu gusto. Yo les puse ojitos, jajaja, y colmillos.


No tiene tanto hacer los corazones. Haz piezas dobles y a la mitad de ellas una abertura con la boquilla de una manga pastelera. Sigue el mismo proceso que con las galletas anteriores. Cuando enfríen, extiende una capa de mermelada de frambuesa (o la que prefieras) para pegarlas. Cubre y rocía las galletas (la de encima) con azúcar glas tamizada. Rellena el centro, con cuidado de no desbordar, con más mermelada.


martes, 21 de marzo de 2017

MENESTRA CON SETAS Y VERDURAS



 
Me gustan estos platos de verduras mixtos. Bien aderezados se convierten en un placer para paladares delicados, sin atisbos de carnes ni pescados (salvo si utilizáis sus caldos, que la verdad sea dicha, enriquecen su sabor) no necesitan más que un comensal que sepa valorar los vegetales como merecen. No hay porqué tomarlos aburridos, por eso tampoco pasa nada si añadimos jamón serrano en taquitos, unos tacos de pollo e incluso unos dados de salmón fresco (previamente rehogados).

A mí no me hace falta ninguno, pues tal como hoy os presento mi plato va sobrado de sabores. Probad y ya me diréis.

Ingredientes:

- Setas variadas y champiñones.
- Ajos 3 dientes.
- Cebolla 1 pequeña.
- Zanahorias baby en conserva.
- Alcachofitas en conserva.
- Guisantes en conserva.
- Huevos cocidos de codorniz.
- Perejil fresco.
- Harina 1 cda, rasa.
- Aceite de oliva.
- Caldo al gusto (verduras, ternera, pollo)
- Sal y pimienta.

Elaboración:

Sofreír en el aceite los ajos laminados. Esperar "a que bailen" y añadir las setas limpias y troceadas. Salpimentar ligeramente y rehogar cinco minutos a fuego fuerte.  Añadir el resto de verduras y rehogar unos minutos más.


  

 




Sofreír la cebolla aparte cortada menuda, cuando se haya ablandado agregar la harina y cocinarla un poco. Añadir algo de caldo y diluirla sin dejar grumos.






Volcar sobre las verduras y mezclar.


Servir caliente acompañada con huevos de codorniz cocidos y perejil picado.




sábado, 18 de marzo de 2017

LOMO DE CERDO CON TOMATE




¡No me digáis que no habéis hecho nunca lomo con tomate! no me lo puedo creer.

Es una receta de las clasificadas básicas en cocina. Tengo seguidores jóvenes que están interesados en este tipo de guisos, por lo que he decidido de vez en cuando traer al blog cocina para ellos. El lomo así preparado queda delicioso. Tal como os explicaré veréis que es fácil de hacer, ya no podréis decir que si os apetece algún día hay que ir al bar de la esquina a que os pongan una ración.

Ya metidos en faena haced más cantidad y guardad cómodamente en el congelador algunos táper que siempre serán bienvenidos a la hora de sentarse a la mesa.


 

Ingredientes:

- Lomo de cerdo 350 g.
- Tomates maduros y carnosos 500 g.
- Cebolla mediana 1.
- Aceite de oliva 6 cdas.
- Pimienta negra molida (opcional).
- Sal.




Elaboración:

 


Limpiar el lomo de grasa y tendones y cortarlo en tacos parejos. Cortar la cebolla menuda y sofreírla en una sartén con su aceite.

Antes de que tome color incorporar la carne. Rehogar cinco minutos.





Pelar y trocear en daditos los tomates.




 



Añadir sobre la carne. Salar y agregar una cucharadita de azúcar. Cocinar hasta que el tomate haya perdido el agua y el aceite sobresalga por encima en los laterales. Remover de vez en cuando para evitar que se agarre.






Servir, mejor acompañado con arroz blanco, pasta, patatas fritas o cualquier otra cosa que os guste.


   

¿Por qué no rellenar con él un buen panecillo?




martes, 14 de marzo de 2017

CROQUETAS DE PIMIENTO ASADO Y MOZZARELLA





Vuelvo con croquetas pues hay para todos los gustos. Como comprobaréis, si las llegáis a hacer, los ingredientes se complementan perfectamente. Estas surgieron de mi invención, pero no pude ponerlas en práctica hasta que mis hijos se hicieron mayorcitos, pues como a Shin Chan no les gustaba el pimiento, jajaja, y a mí, madre sufridora como tantas, no me merecía la pena enfrascarme en tal trabajo para tan "poca gente". A fuerza de irlo introduciendo en distintas preparaciones, más aceptadas por ellos, acabaron por quererlo más o menos. Filosofé con el pimiento y llegué a la conclusión de que no se es adulto hasta que nos gusta, con todo lo negativo o positivo que lleva aparejado ¿Que no quiero hacerme mayor? pues no como pimiento, jajaja... ¿Que quiero que me consideren adulto? pues a comer pimiento a "cascoporro", jajaja.

Que sean de pimiento asado es muy bueno, pero lo mejor es encontrarse dentro un relleno fundente y cremoso: ¡¡¡Mozzarella!!! a costa de la cual la croqueta debe ser mayor de tamaño que otras pues debe quedar muy bien escondida "la sorpresa" con la finalidad de que no tome contacto directo con el aceite y se reviente funestamente  😭.

Mi consejo es tomarlas recién hechas, que no se hayan enfriado, pero cuidando de no quemarse, el momento es cuando el queso todavía está fundido y blandito y amenaza con caer en "lamparón" sobre nuestro pecho.
  

Ingredientes:

- Pimientos asados 180 g. (puedes sustituirlos por pimientos del Piquillo)
- Mozzarella de búfala fresca.
- Harina de repostería 1 tacita de café.
- Leche desnatada 4 tacitas de café.
- Puerro ½.
- Mantequilla 1 cda.
- Pimienta molida (opcional).
- Sal.
- Rebozado común: harina, huevo batido y pan rallado.
- Aceite de oliva 6 cdas.
- Aceite abundante para freír.

Elaboración:

Sofríe el puerro picado y tritúralo en la batidora con los pimientos asados.

Devuelve a la sartén la pasta obtenida, agrega la harina y la leche fría y salpimenta. Cuece a fuego medio durante quince minutos, sin parar de mover para que no se agarre e incorpora la mantequilla. Vuelca en una fuente, deja templar y cubre con film. Enfría en la nevera.



Trocea la Mozzarella en cuadrados. Extiende una porción de la masa y pon un trozo de mozzarella en el centro. Cubre con otra porción de masa extendida y redondea para dar la forma clásica de croqueta. Deja envuelto el queso.

Reboza siguiendo el proceso habitual: harina, huevo batido y diluido en leche y pan rallado.

  

Fríe en abundante aceite procurando hacerlo de tres en tres, o de cuatro en cuatro, si las admite (es decir no se revienten).

Mis consejos para que una fritura sea correcta es que primero debéis calentar bien el aceite (eliminar el sabor a crudo) y luego bajar la llama al medio, esperando un momento para que no vayan a arrebatarse de golpe. Hay que intentar mantener una temperatura constante. No es conveniente freír más de las que admite en cada tanda (se revientan). Paciencia para obtenerlas crujientes y que no queden empapadas, grasientas, lacias, sin gracia, lo que ocurre al disminuir la temperatura del aceite por exceso de croquetas.


Si queréis no gastar mucho aceite escoged para freírlas un recipiente hondo y pequeño. Luego podéis colarlo y usarlo para guisos.



sábado, 11 de marzo de 2017

BIZCOCHO FÁCIL CON COBERTURA DE CHOCOLATE




Tal vez os parezca complicado a primera vista, pero os aseguro que la literatura que tiene esta entrada es para no dejarme nada en el tintero y para que a la hora de que os pongáis con él no encontréis dificultades, más aún al no tener fotos del paso a paso.

Básicamente es un bizcocho normal en el que la cobertura de chocolate juega un papel protagonista. He decorado con unas almendras laminadas, vosotros podéis escoger si dejarlo tal cual o cambiarle el topping, hoy día podéis encontrar bastantes en el mercado de diferentes formas y colores.

La receta de este bizcocho la tomé de un paquete de harinas con levadura, aunque le introduje algunos cambios.


Ingredientes:

- Harina de repostería con levadura incorporada 250 g.
- Huevos 4.
- Azúcar blanquilla 1 vaso y medio.
- Yogur natural 1.
- Aceite de girasol ½ vaso.

Cobertura:

- Chocolate especial fundir 200 g.
- Nata 200 ml.
- Mantequilla 35 g.
- Almendras laminadas.

Elaboración:

Precalienta el horno a 180 ⁰C.

Prepara un molde de cake embadurnándolo con mantequilla.

Bate las yemas con el azúcar hasta que blanqueen. Añade el yogur y el aceite y sigue batiendo para obtener una mezcla homogénea y espumosa. Pásala a un bol grande y agrega la harina tamizada poco a poco. Integra suavemente, envolviendo.

Monta las claras a punto de nieve y agrégalas en dos veces, procurando no bajarlas.

Vuelca en el molde y hornea durante cuarenta-cuarenta y cinco minutos (depende del horno). No abras el horno mientras se hace. Pasado el tiempo indicado puedes abrir para comprobar la cocción pinchando en el centro con un palillo de brocheta (hay que hacerlo rápido), si sale seco retíralo y si aún no se ha cocido da unos minutos más.

Saca del horno, deja unos minutos dentro del molde, vuelca sobre una rejilla y deja enfriar.

Para la cobertura calienta la nata, retira antes de que hierva y añade el chocolate troceado. Remueve hasta incorporarlo y que no queden grumos, si es necesario vuelve a calentar con cuidado de que no hierva. Agrega la mantequilla e integra con varillas manuales.

Coloca el bizcocho sobre una rejilla poniendo una bandeja debajo, algo mayor. Cubre con el chocolate desde el centro a los lados. Extiéndelo con la pala de un cuchillo. Antes de que seque distribuye las almendras en el borde del bizcocho. Deja secar completamente.


  

Con esta misma preparación hice una especie de bundt usando un molde que compré hace años en Lidl. Para terminarlo rocié azúcar glas por encima.



martes, 7 de marzo de 2017

FARFALLE A LA CREMA DE ALBAHACA





Los jóvenes no pueden pasar sin la pasta y no saben qué inventar para renovarla.

Los más suelen hacerse los despistadillos para cocinar, pero casi siempre hay alguno/os que destacan por sus dotes culinarias. A esos destacados les suelen salir amigos incondicionales "que se arriman al querer". Lo bueno de esto, es que el cocinero en ciernes disfruta de lo lindo viendo cómo sus compañeros le hacen la ola. Por supuesto será una comida divertida, pasa cuando se reúnen varios chicos a comer, lo primordial son las risas y mucha hambre. Después, cuando la fuente se quedó vacía y los estómagos llenos, el sopor se hace dueño de ellos y ninguno quiere hacerse cargo de un montón de cacharros acumulados en la cocina. Es lo que hay. No hay más leña que la que arde, jajaja, pero eso son otras historias que no vienen al caso y vienen, sí, a empañar una buena comida.

Les dejo a mis chicos favoritos una receta de pasta que no les pasará inadvertida después de que la prueben.

Se la dedico a mi hijo con mucho cariño, él es algo cocinerillo.


 
Ingredientes:

- Farfalle 300 g.
- Nata cocinar 200 ml.
- Albahaca fresca un manojo.
- Nueces, un puñadito.
- Pollo en dados ½ pechuga.
- Ajo ½.
- Mantequilla 25 g.
- Pimienta negra molida
- Sal.


Elaboración:

Funde la mantequilla a fuego medio y rehoga el pollo y las nueces, salpimentados.

 




Maja en un mortero la albahaca y el ajo sin el germen.







Mientras, cuece la pasta en agua hirviendo, ligeramente salada, y déjala al dente (6-7 minutos) Escurre.

 




Añade la nata y el majado sobre el pollo. Cocina a media llama un par de minutos.






Vuelca la salsa sobre la pasta.
Sirve acompañada de Parmesano.




sábado, 4 de marzo de 2017

HUEVOS AL PLATO SENCILLOS




No hay nada más tradicional que unos huevos al plato. Mi memoria se remonta a la infancia, entonces creo que se hacían más a menudo en casa. Era normal tener siempre huevos para echar mano en situaciones de "emergencia", luego se podían acompañar de cualquier cosa que anduviera por el frigo que iba desde un buen chorizo al ingrediente más insospechado y que pudiera casar sin armar estrépito, tal fue el chocolate ¡qué disparate! -me diréis- jajaja,  pues si, me lo contaron y me lo creí. No los he probado así, es cuestión de gustos y "haberlos haylos".


Ingredientes:

- Huevos.
- Bacón ahumado en tiras.
- Chorizo en tiras.
- Tomate frito (mejor casero) con cebolla.
- Sal.


Elaboración:

Enciende el horno a 180 ⁰C.

Sofríe el bacón en un poquito de aceite hasta que tome color dorado y coloca en el fondo de las cazuelitas. Añade el chorizo. Cubre con tomate y casca los huevos encima procurando que queden centrados.



Hornea hasta que la clara cuaje. La yema debe quedar blanda. Sala un poquito antes de servir.



miércoles, 1 de marzo de 2017

SALTIMBOCCA ALLA ROMANA




Es un plato originario de Italia que se traduce como "salto en la boca", aún no he averiguado porqué, se me olvida preguntarle a mi querida amiga Federica, que todo lo sabe sobre la cocina de su país, y a la que le tengo gran aprecio. Desde aquí le mando un beso grande deseando saber de ella pronto.

Se trata de un escalope, de ternera generalmente, aunque pueden usarse otro tipo de carnes.

Tiene ciertos parecidos con el cachopo, la popular milanesa, o el flamenquín (si enrollamos la carne).

Es fundamental que lleve salvia. Siguiendo una receta italiana, le he puesto para aderezar, en el momento de servir, una salsa con la que riego los escalopes y que está hecha a base de vino blanco y mantequilla reducidos. Es muy rápida de hacer, fácil y deja a nuestros invitados encantados con esta preparación tan especial, vistosa y sencilla.

Me habéis echado de menos, yo también a vosotros. He estado unos días fuera aprovechando la fiesta de Andalucía. Mi destino, esta vez, ha sido Lisboa, Tal vez quienes me seguís ya habéis visto alguna foto en Instagram. No ha sido un viaje de relax y he vuelto un poco cansada, Os doy las gracias por vuestras visitas y comentarios, me pasaré a veros ¡no tardo! Gracias a todos mis seguidores.


Ingredientes:

- Escalopes de ternera 4.
- Jamón de Parma (he puesto jamón español) 4 lonchas.
- Salvia fresca.
- Vino blanco de buena calidad 150 ml.
- Mantequilla 25 gr.
- Harina para emborrizar.
-Aceite de oliva.
- Pimienta molida.
- Sal.



Elaboración:

Espalma los filetes de ternera, cuidando de no romperlos, con un mazo de madera.

Pásalos ligeramente por la harina salpimentada. En una sartén con un fondo de aceite dora el jamón por los dos lados, sólo que cambie de color, durante unos segundos. Retira, reserva y pon los escalopes. Dora por ambos lados con unas hojas de salvia.




Mientras, reduce en un cazo la mantequilla con el vino.


Retira la carne y dispón el jamón encima de cada filete. Riega con la salsa y sirve enseguida. Adorna con la salvia.