Esta receta de pretzels es del año pasado, entre medias ya los he hecho varias veces más y he modificado algunos ingredientes, pero en lo
básico siguen siendo los mismos.
No me voy a extender demasiado porque ando un poco escasa de
tiempo en estos días y hoy no es precisamente uno en el que me sobra. Espero
que me queden más ratos libres, ya os tendré al tanto.
La receta es de C. Bretherton.
Ingredientes:
- Harina de fuerza
para pan 350 g. y algo más para enharinar la encimera.
- Harina normal de
trigo 150 g.
- Azúcar 2 cdas.
- Levadura seca 2
cdas.
- Sal 1 cdta.
- Sal 1 cdta.
- Agua templada 300 ml.
- Aceite de girasol 1
cda. y algo más para engrasar
Elaboración:
Mezcla las harinas con la sal y azúcar en un bol. Diluye la levadura con el agua (cuidado con
no excederse de temperatura, basta tibia). A los cinco minutos de reposar la
levadura añade el aceite. Vierte sobre las harinas y une bien. Haz una masa
homogénea con las manos.
Pasa a la encimera y amasa diez minutos hasta que quede lisa y brillante. Mete en un bol untado con aceite de girasol y tapa con film. Deja que la masa crezca alrededor de dos horas.
Saca del bol y desgasifica sin golpearla sobre una superficie enharinada. Divide la masa en dieciséis porciones.
Haz un rollo con cada porción y sobre la encimera alarga
cada rollo (dice Bretherton con 45 cm de largo y cuando me puse a extender me
parecía que aquello no tenía fin, jajaja, se quedaron en treinta). Coge de las
puntas cada rollo y da vueltas como cuando vamos a saltar a la comba y ya sobre
la encimera cruza dejando un orificio central y cierra abrazando los extremos
presionando ligeramente para que no se vayan a soltar (os dejo para que os sea
más fácil entenderlo una secuencia de fotos).
Pon los pretzels en una bandeja de horno sobre papel
parafinado, cubre con film y un paño y deja levar nuevamente una media hora
(los dejo dentro del horno apagado).
Después, sería el momento de glasearlos, cosa que en esta
receta no hice para no alargar demasiado el proceso. Probé en otra ocasión y no
me funcionó, pero no desisto, estoy en ello. El bicarbonato y sus dos baños me
han fallado, no supe hacerlo. Bueno, pero el resultado me gustó bastante y
pienso, a mi modesto entender, que este baño no los hace más bonitos, aunque añadido
a su forma, es su principal característica.
Antes de hornear (precalentar a 200 ⁰C), pincela con huevo
batido y pon semillas de sésamo por encima (añadí unos granitos de sal gruesa).
El tiempo de horneado es de aproximadamente quince minutos.