La primera
vez que las probé no supe en principio qué era lo que estaba comiendo, sí supe
que se trataba de pescado. Su textura gelatinosa y a la vez firme me hacía
dudar. Aquello estaba bueno. Esto de ir a un restaurante y que no te digan qué
comes no suele pasarme, en este sitio se comía así, si quieres lo comes y si no
lo dejas (como las lentejas, jajaja). No había carta, se servía lo que al jefe
de cocina le apetecía ese día.
A mí me
gustó, aquello era original y para los que no somos demasiado delicados con las
comidas me pareció emocionante y divertido...
... Este sitio
ya no existe y lo lamento de verdad pues te transformaban la
comida, o ponían cosas poco habituales a nuestros paladares, y lo mejor ¡todo estaba perfectamente cocinado y muy
rico! ¿Qué como se llamaba? ¡la Duda! (extraído del libro: "Restaurantes singulares que imaginé o de otros mundos").
Con la duda
no os dejo y paso a contaros qué cosa era aquello que comí y que me gustó. Mucha
ciencia no tiene.
Ingredientes:
- Cocochas de bacalao.
- Harina.
- Huevo batido.
- Pan rallado.
- Aceite de oliva.
- Sal.
Elaboración:
Limpiar y
lavar bien las cocochas. Secar con papel de cocina. Enharinar, pasar por huevo
batido y luego por pan rallado.
Freír en
buen aceite. Dorar y retirar. Dejar unos
segundos en papel de cocina. Servir muy calientes con unos rabanitos y rodajas
de limón. Casarían bien con una salsa griega.
Y por descontado sería buena idea acompañarlas con una estupenda porra antequerana, con sus colines de san
Roque y todo.
madre mia como tienen que estar, la verdad que me gustaria probarlas porque mira que he probado cosas pero las cocochas no recuerdo haberlo hecho. un besotee
ResponderEliminarmadre mia como tienen que estar, la verdad que me gustaria probarlas porque mira que he probado cosas pero las cocochas no recuerdo haberlo hecho. un besotee
ResponderEliminarQue ricas las cocochas, nunca las habia probado y hace poco me animé y la verdad es que son algo muy rico. Por cierto la porra riquisima. Ya la habia visto con atun, mis amigos de Antequera, eependiendo de la familia, la aliñan de un modo u otro, por ejemplo con jamon y queso curado en tacos, salchichón, pan, ...
ResponderEliminarUn besito enorme
Para lo que me gusta el bacalao, las cocochas es algo que no suelo hacer, pero después de ver lo bien que han quedado las tuyas y lo sencillamente que las has cocinado, no me apetece para nada perderme este rico bocado.
ResponderEliminarBss
¿Te quieres creer que todavía no he probado las cocochas? o a lo mejor me las han puesto en algún restaurante y no me he enterado...jjj Estas que has preparado se ven muy ricas, que seguro lo están porque el bacalao me encanta!
ResponderEliminarAl final me has dejado con la duda...díme ¿te pasó a tí o la introducción es sacada de ese libro? divertido sería de todas formas! Un beso.
Uuuummmm que pinta ummmm que babeo viendolas, tomo nota que deben de estar de muerte
ResponderEliminarBesos guapetona
Hola Alicia! !! Por aquí no hay cocochas así que nunca las he probado y mira que los grandes cocineros la usan muchísimo. Y tú, como gran cocinera que eres también la tienes en tu recetario pero cocinada para todos los públicos. Ahora voy a ir a la caza de las cocochas que me ha encantado como las has hecho y ahora tengo curiosidad de ver lo ricas que tienen que estar. Besitos.
ResponderEliminarHola guapísima !!!
ResponderEliminarPues tengo que decirte que sólo las he comido una vez, aunque eran de merluza. Nos la preparó una amiga vasca y a mí me parecieron exquisitas. Siempre que voy a comprar pescado, me fijo bien, pero nunca las he visto a la venta, por aquí no hay tradición de comerlas.
Ese restaurante, tenía que ser la pera jaja . . . aunque yo me hubiera apuntado también con los ojos cerrados, menuda novelera soy para probar cosas nuevas (menos saltamontes y cosas de esas, todas las demás, sin problemas)
Tu forma de cocinarlas tienen que crear un contraste riquísimo, entre el crujiente del rebozado y la textura gelatinosa, ummm me lo estoy imaginando y el buen acompañamiento que has hecho, hoy te has lucido a base de bien.
Me ha encantado.
Besotes gordos mi niña, feliz día.
Un restaurante curioso por la forma de comer, pero tenía su gracia, el esperar con qué e iban a sorprender ese día.
ResponderEliminarTienen que quedar ricas con esta doble textura, crujiente por fuera y gelatinosas por dentro, perfectas para acompañar la porra antequerana completa.
Besos.
Es cierto, están deliciosas.
ResponderEliminarTienen que estar riquísimas nunca las he probado así, yo me apuntaría también a ese restaurante, me encanta probar cosas nuevas, besos.
ResponderEliminarHola Alicia, las cocochas de bacalao son algo exquisito, yo las he comprado alguna vez, pero en salazón, una vez desaladas, cocinadas al pilpil, son una delicia. Tu receta es estupenda, si alguna vez las encuentro frescas. Besos y feliz tarde.
ResponderEliminarExquisitas estarian, son muy ricas y tu las preparado divinamente, y con un acompañamiento tan maravilloso seria una maravilla disfrutarlas....Bess
ResponderEliminarUna exquisitez seguro porque yo todavía no las he probado ni siquiera las de merluza, la macera de prepararlas me gusta pues es sencilla y a la vez muy sabrosa, tengo que probarlas aunque solo sea por una vez.
ResponderEliminarUn besito y feliz semana.
Qué bocadito tan exquisito!! Yo me lo llevo para saborearlo con gusto!! Un beso cariño!!!
ResponderEliminarMe encantan las cocochas de cualquier manera.
ResponderEliminarGracias por recordarme esta.
Un abrazo
Que ricas ami me gustan muchos nunca las prepare empanadas pero las probare besitos
ResponderEliminarTienen que estar muy buenas, las tendré que probar así empanadas.
ResponderEliminarBesos
Cocinando con Montse
Bocado divino! No he probado las cocochas pero por lo que cuentas, seguro que me gusta y así rebozaditas, de lujo. Pena que haya cerrado el restaurante! BSS!!
ResponderEliminar¡Madre mía, Alicia! Con esas cocochas me iba yo a la porra antequerana más feliz que 3! A mí no me quedan tan bonitas! jajaja Me encantaría ir a un restaurante de ese tipo, en el que te ponen lo que les da la gana y tu te quedas como un rey medieval. Que a veces es salir a comer, ver la carta y estar media hora dándole vueltas al libreto a ver qué narices te apetece comer, si va a engordar mucho o no, que si pitos que si flautas. Si te ponen lo que hay te ahorras todo eso y es como cuando le preguntaba a mi madre: "¿qué hay de comer?" y me respondía: "lengua de preguntadora" jajajaja Un beso grande!
ResponderEliminarNena nunca las he probado pero vaya pinta!! La porra si porque es de aquí al lado de Antequera y ME ENCANTA jajajjaj. Un beso guapa!!
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