Con una base de pasta brisa y unas
hortalizas variadas podemos preparar una deliciosa comida de manera rápida, con
la garantía de que nadie se va a disgustar. Si queremos hacerla más completa le
podremos añadir jamón serrano, lomo de cerdo, pollo y por supuesto pescados
como atún, caballa, pulpo o cualquier cosa que se os ocurra que pueda irle
bien. Hoy sólo le he puesto verdura.
Ingredientes:
-
Pasta brisa redonda 1.
-
Berenjena 1 (mediana).
-
Calabacín 1 (mediano).
-
Cebolla ½.
-
Ajos 2 dientes.
-
Pimienta molida.
-
Pimientos verdes 2.
-
Tomate troceado de lata 250 g.
-
Azúcar 1 cdta.
-
Aceite de oliva 4 cdas.
-
Sal.
Elaboración:
En un molde redondo y con el papel de
fábrica de base colocamos la masa brisa. Ajustamos los bordes y pinchamos el
fondo con un tenedor.
Precalentamos el horno a 180 ºC.
Ponemos el aceite a calentar y vamos
sofriendo primero los ajos picados y después las demás hortalizas cortadas en
dados gruesos y por este orden: cebolla, pimientos, berenjena y calabacín.
Dejamos un tiempo entre una y otra. Salpimentamos.
Aparte freímos el tomate unos diez
minutos, en un poco más de aceite, le añadimos sal y azúcar. Mezclamos todo.
Dejamos que enfríen mientras las escurrimos
en un colador para que suelten el líquido.
Llevamos la pasta brisa al horno y
dejamos diez minutos. No os importe que se infle la base pues al sacarla
bajará. Esperamos que enfríen las verduras, no conviene ponerlas en caliente sobre la pasta.
Rellenamos con las hortalizas y volvemos
a introducir en el horno otros quince minutos. Podemos pincelar los bordes con yema batida para darle brillo.
Servimos caliente. Os aconsejo comerla en
el instante pues de dejarla más tiempo se reblandece la base y desluce.